Budín Mágico de Vainilla y Duraznos

Un budín casero siempre es sinónimo de hogar, aroma dulce y momentos compartidos. En esta receta descubrirás cómo preparar un budín esponjoso y delicado con el sabor inconfundible de la vainilla y la frescura de los duraznos.

Es fácil, económico y perfecto para acompañar un café, una merienda familiar o como postre ligero después de una comida.

Lo llamamos mágico porque, con pocos ingredientes, el resultado sorprende por su textura húmeda y su sabor encantador. Además, es una receta versátil que puedes adaptar con otras frutas según la temporada.

Ingredientes

  • 2 huevos (a temperatura ambiente, para que batan mejor).

  • 100 g de azúcar (puedes usar blanca o morena para un sabor más caramelizado).

  • 100 cc de aceite (de girasol, maíz o incluso oliva suave).

  • 100 cc de leche (entera, descremada o vegetal si prefieres).

  • 1 cucharadita de esencia de vainilla (el alma de esta receta).

  • 200 g de harina leudante (o harina común + 1 cdita de polvo de hornear).

  • 150 g de duraznos en almíbar (cortados en cubitos pequeños).

Tip: Si no tienes duraznos en almíbar, puedes usar fruta fresca, peras, manzanas o incluso frutos rojos.

Procedimiento paso a paso

  1. Batir los huevos y el azúcar: En un bowl grande, bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla quede espumosa y de color más claro. Esto le dará aire al budín y lo hará más esponjoso.

  2. Incorporar los líquidos: Añade el aceite, la leche y la esencia de vainilla. Mezcla suavemente hasta integrar todo.

  3. Agregar los secos: Incorpora la harina leudante previamente tamizada para evitar grumos. Mezcla con movimientos envolventes para no perder aire en la preparación.

  4. Añadir la fruta: Agrega los duraznos en cubitos y mezcla suavemente para que se distribuyan de manera pareja en la masa.

  5. Hornear: Vierte la mezcla en un molde enmantecado y enharinado. Lleva al horno precalentado a 170-180 °C durante 35 a 45 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.

  6. Enfriar y disfrutar: Deja reposar el budín unos minutos antes de desmoldar. Puedes decorarlo con azúcar impalpable o acompañarlo con crema batida o helado de vainilla.

Consejos adicionales

  • Más humedad: Si quieres un budín aún más jugoso, agrega 2 cucharadas del almíbar de los duraznos a la mezcla.

  • Sabor extra: Añade una pizca de canela o ralladura de limón a la masa para darle un toque aromático.

  • Textura crujiente: Espolvorea almendras fileteadas o nueces picadas por encima antes de hornear.

  • Versión integral: Sustituye la mitad de la harina por harina integral fina para una opción más nutritiva.

¡Este Budín Mágico de Vainilla y Duraznos es una receta perfecta para cualquier momento del día. La combinación de la suavidad de la vainilla con la frescura de la fruta lo convierte en un clásico que nunca falla!

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