Pan de Avena y Chía Sin Harina – Esponjoso, nutritivo y sin culpa

El pan no siempre tiene que estar cargado de harinas refinadas ni de grasas innecesarias. Con esta receta, podrás preparar un pan casero a base de avena y semillas de chía, que resulta nutritivo, esponjoso y perfecto para quienes buscan una opción saludable sin sacrificar el sabor.

Ideal para acompañar desayunos, meriendas o incluso como base para un sándwich ligero, este pan se convertirá en un aliado de tu día a día.

Ingredientes

  • 2 tazas de avena en hojuelas (puede ser sin gluten si lo prefieres).

  • 3 cucharadas de semillas de chía.

  • 1 cucharadita de polvo de hornear.

  • ½ cucharadita de sal.

  • 2 huevos.

  • 1 taza de agua o leche vegetal (almendra, soya, avena, la que uses normalmente).

  • 2 cucharadas de aceite de oliva o de coco.

  • Opcional: semillas de girasol, calabaza o nueces para decorar y darle un toque crujiente.

Preparación paso a paso

  1. Activa las semillas de chía
    Coloca las semillas en un vaso con 6 cucharadas de agua y deja reposar durante 10 minutos. Esto formará un gel natural que ayudará a dar textura y esponjosidad al pan.

  2. Procesa la avena
    Lleva la avena en hojuelas a una licuadora o procesador y tritúrala hasta obtener una especie de harina gruesa. Si quieres una textura más rústica, puedes dejar algunas hojuelas enteras.

  3. Mezcla los ingredientes secos
    En un bol, combina la avena triturada, el polvo de hornear y la sal.

  4. Añade los ingredientes húmedos
    Incorpora los huevos, el aceite y la leche o agua. Mezcla bien hasta obtener una masa homogénea. Agrega luego el gel de chía y continúa mezclando.

  5. Vierte la preparación en un molde
    Engrasa un molde rectangular con un poco de aceite o fórralo con papel manteca. Vierte la mezcla y distribúyela de forma uniforme.

  6. Decora con semillas o frutos secos
    Si lo deseas, espolvorea semillas de girasol, calabaza o nueces troceadas sobre la superficie antes de hornear. Esto no solo aporta un toque crujiente, sino también más nutrientes.

  7. Hornea
    Lleva a un horno precalentado a 180 °C y cocina durante 35 a 40 minutos, o hasta que al insertar un palillo este salga limpio.

  8. Enfría y desmolda
    Retira el pan del horno, deja reposar 10 minutos y luego desmolda para que termine de enfriarse sobre una rejilla.

Consejos adicionales

  • Más esponjoso: si quieres un pan aún más aireado, separa las claras de los huevos, bátelas a punto nieve e incorpóralas al final con movimientos envolventes.

  • Endulzado natural: para una versión ligeramente dulce, puedes añadir 1 cucharada de miel o sirope de agave a la mezcla.

  • Textura más crujiente: tuesta las semillas de girasol o calabaza antes de agregarlas como topping, esto intensificará su sabor.

  • Conservación: guárdalo en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 3 días, o refrigéralo para que dure una semana. También puedes cortarlo en rebanadas y congelarlo.

Este pan de avena y chía sin harina es perfecto para quienes buscan alternativas saludables, sin gluten (si usas avena certificada) y llenas de nutrientes. Ligero, versátil y lleno de fibra, se adapta tanto a preparaciones dulces como saladas.

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